Hace unos dias , organizamos en casa una reunion familiar. Era el cumpleaños de mi sobrino e mi madre decidió preparar una comida y reunir a todos como cuando eramos niños. "Venid temprano y prepararemos juntos el pastel.", nos dijo por telefono.Dicho y hecho, nos presentamos por las diez de la mañana y a las onze, ya hubiemos montado una batalla campal en la cocina. Bajo de una lluvia de harina, con la nariz y las manos llenas de nata, el delantal cobierto de chocolate y marmelada, niños y mayores lo pasamos en grande. Al final no logramos hacer el pastel, pero eso fue lo de menos. Lo mejor fueran los momentos que compartimos, dejando a un lado los problemas del dia a dia. Y es que ese afecto mágico que puede llegar a crear una cocina: reunir todos los que quieres, exprimentar con sabores, olores y texturas y disfrutar alrededor de una mesa de momentos inolvidables e irrepetibles.
Texto:Habitania e foto roubada da net.
Sei que os leitores não são espanhóis, sei que algumas palavras não vão entender, mas um esforço faz sempre bem.Lol.
Copiei este texto porque conseguiu transportar a minha pessoa há muitos anos atrás. A minha infância. Belos tempos. Quando a família estava toda junta. As festas. Penso que quando se é criança, se consegue atingir a felicidade com meia dúzia de sonhos realizados( um brinquedo qq que tanto se deseja...)Quando se é adulto é bem pior....
O realçar a importância da cozinha naquele conto e naquele tempo.
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